Atzacan, Ver.- El palacio municipal de Atzacan amaneció cerrado el martes y permaneció así el resto de la semana, en medio de un supuesto acto de simulación para obstaculizar la reinstalación de 11 trabajadores despedidos que ganaron un laudo laboral.
La llegada de personal del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje estaba programada para investigar por qué no se han cumplido los laudos laborales emitidos. Según los pobladores, tres personas colocaron letreros reclamando una supuesta mejora en un camino hacia la comunidad de El Nogal, aunque los presuntos quejosos no estaban presentes.
El problema en el ayuntamiento surgió cuando 11 trabajadores fueron despedidos injustificadamente en 2014 y ganaron un juicio laboral. A pesar de las órdenes de reinstalación y pago de salarios caídos, el Cabildo, liderado por el alcalde Mario Alberto Vargas Amador, no ha cumplido.
El Tribunal Federal de Conciliación emitió tres órdenes de arresto para los integrantes del Cabildo, incluyendo al presidente municipal, la síndica y una regidora, como medida de apremio; sin embargo, estas órdenes tampoco han sido ejecutadas.
Gabriela Domínguez