Al dedo le vino a la oposición poco informada el exhorto que hace la SEP –la orden como dicen algunos-. De no reprobar a ningún alumno de nivel primario y medio superior, quesque para evitar la deserción y el rezago escolar.
Y les vino al dedo porque desde hace varios días recorre las redes sociales un video del Peje donde literalmente dice ‘Morena obtiene sus votos con la gente más ignorante. Entre más analfabetismo, más apoyo a Morena’.
En conclusión, si usted como yo, votó por obrador, ¡pues es ignorante!, pero sarcasmo aparte lo que en realidad me molesta de estas personas es que en vez de dar argumentos buscan desacreditar y en el camino confunden o desvalorizan a la población. Sólo por ponerlo en situación: ¿Qué pasa con esa gente que se refiere al presiden como “lopitos” o ´López’ en tono despectivo? López es el cuarto apellido más extendido en México. Cuando tratas de menospreciar al presidente por su apellido, estás menospreciando a millones de mexicanos que se apellidan López. “¡Es que es un López!”, “es un Godínez”. ¡Carajo! Ojalá todos nos apellidáramos Ibargüengoitia, Videgaray o Norzagaray entre otros apellidos fifís.
Primero hay que decir que ese video que dura 17 segundos es un extracto de su conferencia mañanera del 7 de junio pasado, donde “Lopitos” parafrasea al escritor Martín Moreno. Al sacar de contexto las palabras del presidente queda clara su mala intención y es que, aunque hay mucha gente que vio cortados sus privilegios por la 4T, también hay mucha otra que sin ningún tipo de canonjías sigue denostando a quienes apoyamos un cambio en el país. Lo cual me hace preguntar ¿Quién es el ignorante aquí?
Antes de continuar me imagino lo que están pensando, así que reitero: ya sé que Morena está llena de remoras oportunistas. Es normal, todos los gobiernos han sido así y no porque haya un 10 por ciento de personas comprometidas va a cambiar el otro 90. Comprométase usted también. Si le piden mochada no la dé. Aunque le salga más caro, pague su multa.
Ahora, si usted es una de esas personas con licenciatura y maestría a los que no les está yendo bien, pues me da pena ser quien se lo diga, pero seguro estudió lo que quería y no lo que el mercado demandaba. No se culpe, me pasó a mí también y es que así nos enseñaron. No es culpa del presidente, es culpa de una generación que no supo ver los engranes de la economía y pensaba que estudiar mucho garantizaba el éxito.
Eso me lleva al tema con el que empecé este comentario. Esta lamentable determinación no es nueva, viene del gobierno del presidente Peña Nieto y obedece a que México es uno de los países de la UNESCO con mayor índice de reprobación. ¿Y cuál fue la brillante solución de nuestros gobernantes? No reprobar a nadie. Se lo digo porque lo viví como docente allá del 2018.
Desde luego, eso no cambia el hecho de que los jóvenes salgan engañados, pensando que esos conocimientos no los van a requerir en el futuro, pero… ¿los van a requerir? ¿Cuándo fue la última vez que usted usó la raíz cuadrada o el cuadrado binomio perfecto?
Según el INEGI en el último año 6.5 millones de personas abandonaron la escuela porque tenía que trabajar o no tenía dinero para seguir estudiando y es que cuando se tiene hambre los libros no son una prioridad.
La realidad es que, aunque necesitamos gente especializada, necesitamos bien poquita. La gente que se especializa no trabaja el campo, no manufactura, no genera productos. Ya desde los 90´s vivimos un aumento de oferta educativa, mucha y de muy mala calidad que sólo ha dañado a la sociedad dejando especialistas mal preparados, aumentando la oferta en el mercado laboral y obligando a especializarnos cada vez más para obtener los mismos resultados.
Por otro lado, la tecnología deja cada vez menos espacios para los trabajos productivos, lo que nos obliga a especializarnos en masas con los efectos ya arriba señalados.
Yo por mi parte siempre promoví que se suspendieran las clases al 100 por ciento durante la pandemia. Retrasar la salida de tres generaciones de profesionistas hubiera dado un respiro a la fuerza laboral activa, sobre todo en el contexto de desempleo como el que se vive.
Sin embargo, eso se llama organización social de la producción y se considera violatoria de los derechos humanos. Ahí tiene usted: aprobar a las masas sin filtros es arrojarlos a un ambiente de bajas oportunidades laborares y descontento social; reprobarlos es arrojarlos a un contexto de oportunidades de trabajo… en el narcotráfico, porque claro, romperse la madre en el campo, eso nadie quiere.
Como adivina, el conflicto es más profundo y debería ser tomado con mayor seriedad que la simple mezquindad de denostar al presidente.
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