Xalapa, Ver.- El secuestro de Santiago Rodríguez y Emma Lucía Bandala, en Poza Rica podría haber sido motivado por una venganza.
Este jueves, la fiscal general del estado, Verónica Hernández Giadáns, dio a conocer los pormenores del secuestro y homicidio que han consternado a la opinión pública.
La línea de investigación, narró, se basa en una demanda civil presentada por Emma Lucía, legítima propietaria de una vivienda ocupada ilegalmente por los padres de uno de los implicados en el crimen. La resolución de esta disputa parece haber llevado a un acto de venganza planeado y ejecutado por el grupo delictivo al que pertenecía el hijo de los ocupantes.
En la cronología de los hechos, basada en investigaciones y diligencias llevadas a cabo por las autoridades correspondientes, la fiscal narró que el miércoles 8 de abril de 2024, Santiago Rodríguez Navarro recibió una llamada telefónica en la que se solicitaba información sobre una camioneta que estaba siendo anunciada para la venta en redes sociales. Ese mismo día, Santiago y Emma salieron de su domicilio a bordo de su camioneta Nissan Pathfinder 2016, con destino a la colonia División de Oriente en Coatzintla, Veracruz, donde se les citó para mostrar y vender el vehículo. Desde ese momento, se perdió todo contacto con ellos.
Al día siguiente, un familiar de Santiago recibió una llamada del número del celular de este, en la que se exigía un millón de pesos como rescate por la liberación de las víctimas. Trágicamente, esta fue la última comunicación que se recibió. A partir de entonces, se desplegó un arduo trabajo de investigación que incluyó la asesoría especializada en el manejo de la negociación, así como trabajos de gabinete y campo para identificar lugares, personas y análisis de telefonía celular.
El 6 de mayo, durante un cateo en un domicilio en Poza Rica, se reportó la localización de la camioneta propiedad de las víctimas en el estacionamiento del hotel «Liz», pintada de blanco. El proceso de investigación continuó, y el 15 de mayo, se recibió un alerta sobre un inmueble en Palma Sola, Coatzintla, donde presuntamente se encontraban personas privadas de su libertad. Esto llevó a un enfrentamiento armado entre los delincuentes y las autoridades, resultando en la detención de varios sospechosos.
El 16 de mayo, un juez de control del Distrito Judicial de Poza Rica emitió una orden de aprehensión contra dos individuos por el delito de secuestro en agravio de Santiago y Emma. Ese mismo día, se realizó una diligencia de cateo para la exhumación de cuerpos en un inmueble en Coatzintla, donde se logró la recuperación de individuos no identificados.
Los cuerpos exhumados fueron trasladados a la Unidad de Identificación de Restos Humanos de Nogales donde fueron identificados mediante disciplinas que incluyeron medicina, antropología, odontología, dactiloscopia y genética. Las características individualizantes de las víctimas directas se establecieron con precisión, permitiendo una confirmación definitiva de sus identidades.
Siguiendo los protocolos establecidos, el pasado 5 de junio, se llevó a cabo la diligencia de notificación, en la que estuvieron presentes las víctimas indirectas, un asesor de víctimas, la psicóloga de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAIV) y un representante de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH). Tras aceptar los resultados presentados, el día de hoy, a las 12 horas, se inició la entrega digna de los cuerpos a la familia, marcando un paso crucial en el proceso de justicia y cierre para los seres queridos de Santiago y Emma.
De la Redacción
