Ayer domingo en el Palacio de San Lázaro, el recinto Legislativo, se vivió un momento histórico. A pesar del circo montado, que después hablaré de él, pudimos ver una sesión en la que por primera vez en la historia un presidente de México pierde una votación de reforma constitucional.
Debemos estar contentos de que los legisladores por lo menos asistieron un logro 499 legisladores presentes de los 500 (De acuerdo a la tabla publicada de votaciones en la página de la Cámara). Creo en los pocos momentos que hay 500 diputados es cuando se instala la Cámara. Pero ayer sí se pudo ver el compromiso de los Diputados para defender su posición en favor o en contra de la reforma eléctrica. Eso es de aplaudir.
Lo malo es el circo que se montó, desde el inicio hasta el final de las casi 12 horas en general solo vimos un circo que da pena. Era un momento importante de votar no solo una reforma, era votar por la legalidad, por el futuro de México, por las inversiones, por el medio ambiente, por la gente más pobre. Desgraciadamente hoy nuevamente el mayor porro incitador de México, el inquilino de Palacio vuelve a arremeter, vuelve a llamar traidores a la Patria a los que no van con él, sigue engañando al pueblo.
Considero que el tiempo de la sesión de ayer pudo haber sido máximo de 3 horas, desde luego que conozco el proceso legislativo, conozco que debe haber posicionamiento de las comisiones, posicionamiento de los Partidos, oradores a favor y en contra. Pero también conozco como la mayoría que la votación estaba decidida, que no pasaría, que o había mayoría calificada.
Por lo tanto lo que ayer los ciudadanos esperábamos era un debate de altura, era una explicación al ciudadano, era ver a los representantes populares hacer su papel para explicar los motivos de su voto. Era ver a los diputados de MORENA y aliados defender su postura con dignidad, con argumentos, sin poner los muñequitos de AMLO, sin vitorear a su Tlatoani, era seguir su consejo, “Rebélense”. Y solo vimos descalificaciones, agresiones, repetición de discursos y una pésima conducción de la sesión por parte de la diputada presidente en turno Karla Almazán.
Salvo algunas honrosas excepciones los discursos fueron de agresión de enfrentamiento, de repetición de las frases de AMLO por traición y por el pueblo. Se les olvida que cuando hablaban de bajar el precio nadie les cree, la gasolina no baja, sí aumenta, el gas sigue un carrera inflacionaria de miedo. Hablaban de ecología y en la práctica lo que vemos es destrucción de selvas y contaminación del agua por el Tren Maya. ¿Cómo se les puede creer? ¿Cómo confiar si para cerrar la sesión salen con tonterías triunfalistas y de revancha? Así lo hizo Godoy.
Lo muy rescatable es que los diputados de la oposición se mantuvieron firmes, se mantuvieron como les pedimos los que queremos a México, unidos y convencidos de votar en contra de esa reforma eléctrica. Vimos la presencia de todos, y la votación unánime en contra, bueno excepto el del diputado del PRI Carlos Aysa. Eso es para decirles gracias y felicidades.
La votación fue: MORENA 201 a favor y un ausente, PAN 113 en contra (100% asistieron), PRI 70 en contra 1 a favor (100% asistieron), PVEM: 40 a favor y 2 en contra, PT: 33 a favor, MC: 24 en contra (100% asistieron) PRD: 14 en contra (100% asistieron).
Ahora lo que viene es la venganza que hoy anticipa AMLO, seguro en el presupuesto del 2023 lo veremos. Hoy lo que viene es ver que hará la SCJN para corregir su grave error en la resolución de inconstitucionalidad de la Ley de la Industria Eléctrica que debe ser desechada por inconstitucional y lo mejor sería que AMLO entendiera que ya no es más ese dueño de México él no es la Patria. Debe corregir su rumbo, debe corregir la política pública que aplica hasta la fecha, debe aprender a dialogar, debe respetar a las Instituciones, debe parar su ataque al INE, y los Partidos y ciudadanos enfocarse en las elecciones para gobernador, congresos locales y ayuntamientos que se harán el próximo mes de junio.
En lugar de desacreditar a los legisladores AMLO debe enfocarse a trabajar para generar certeza jurídica y política en favor de inversiones, en favor de crear empleos que es como saldrá adelante la población. Hay mucho trabajo que hacer para mejorar la salud, la seguridad, la educación.
Tomás Trueba Gracián
