Orizaba, Ver.- Este domingo, las calles del centro de Orizaba se llenaron de color y tradición con la exhibición de los tapetes de aserrín elaborados por artesanos de Huamantla, Tlaxcala, como parte de los festejos en honor a San Miguel Arcángel.
Efrén Chacón Godos, maestro artesano a cargo del equipo que diseñó y ejecutó los tapetes, explicó que la preparación de esta exhibición no es una tarea sencilla. “No es algo que se haga de un día para otro, requiere una logística previa de aproximadamente tres meses. Durante ese tiempo definimos los diseños, creamos las plantillas y preparamos los materiales, que incluyen aserrín pintado, viruta, arena y diamantina”, detalló Chacón.
Los tapetes se extendieron a lo largo de 570 metros, cubriendo desde el Palacio de Hierro hasta la Alameda Central. Este monumental trabajo contó con la participación de 80 personas y el uso de más de 400 costales de aserrín y otros materiales, que fueron minuciosamente colocados para dar forma a figuras religiosas y culturales.
Una de las novedades de este año fue la inclusión de la imagen de Francisco Gabilondo Soler, “Cri Cri”, originario de Orizaba, en los primeros tramos de los tapetes, en respuesta a una solicitud especial del ayuntamiento. “Orizaba es una ciudad muy bonita, y es un placer venir cada año a compartir nuestro arte con su gente”, mencionó Misael Hernández, otro de los artesanos involucrados.
Desde las primeras horas de la mañana, los visitantes se congregaron en el centro para admirar el trabajo de los artesanos. “Es muy satisfactorio ver el interés de la gente desde tan temprano. El esfuerzo vale la pena cuando ves el impacto que tiene en los demás”, añadió Chacón.
La tradición de los tapetes de aserrín en Orizaba, traída por los artesanos de Huamantla desde hace 17 años, se ha consolidado como uno de los eventos más esperados de los festejos de San Miguel Arcángel, que cada año atrae a miles de turistas.
Gabriela Domínguez