Orizaba, Ver.– El obispo Eduardo Cervantes Merino subrayó el profundo significado espiritual de las recientes festividades patronales en la ciudad de Orizaba al pedir a San Miguel Arcángel que proteja a la comunidad «de las acechanzas del demonio».
Monseñor advirtió que el espíritu maligno busca eliminar la presencia de Dios en la vida de las personas y es el generador del odio, la división y la mentira. En sus oraciones, solicitó la intervención de San Miguel para liberar a la gente «de caer en las garras del maligno».
Destacó la magnitud de las festividades, que culminaron con la impresionante exhibición de tapetes creados por artesanos de Huamantla. Estos tapetes de arte efímero, con sus intrincados diseños y colores vibrantes, iluminaron la vida de la comunidad.
Según el obispo, los tapetes representan un camino, y en ocasiones, el camino que cada individuo recorre puede estar lleno de obstáculos y peligros; sin embargo, instó a la gente a caminar ese sendero con alegría y esperanza, recordando la importancia de mantener la fe incluso en tiempos difíciles.
Durante su recorrido por las calles de Madero y Colón Poniente, donde se exhibieron los tapetes de aserrín, el obispo fue saludado por los feligreses, quienes compartieron el espíritu festivo y religioso de estas celebraciones patronales en Orizaba.
Gabriela Domínguez