Rafael Delgado, Ver.– Las primeras lluvias de la temporada provocaron un deslizamiento en el cerro de Omiquila, dejando prácticamente sin bienes materiales a seis familias de la comunidad.
La señora Josefina Flores Hernández, una de las afectadas, relató: «Perdí mi refrigerador, mis camas, los colchones, perdí todo. Fue en la tarde, como a las 17:30. Yo estaba abajo, pero mis hijos estaban aquí con mis papás y corrí por mis niños».
La preocupación de los habitantes se intensifica ante la posibilidad de nuevos deslizamientos y la inminente caída de rocas, agravada por un incendio reciente en el cerro afectado.
Claudia Jiménez compartió su experiencia: «Habíamos llamado a nuestros nietos a comer; de lo contrario, habrían estado en la casa cuando el lodo empezó a entrar, lo cual duró aproximadamente media hora».
José Andrés Cortés Santos describió cómo el lodo invadió la casa de su hermano, causando daños significativos en la cocina y destruyendo algunas pertenencias. «El deslizamiento arrastró más de diez totolitos que ahí estaban y que no pudimos encontrar, pues seguramente quedaron sepultados por el lodo», lamentó.
La alcaldesa Alejandra Enríquez Ortiz aseguró que el ayuntamiento ha respondido con prontitud a las necesidades de los afectados, proporcionándoles ropa y zapatos tras la pérdida total de sus pertenencias durante el deslave. «Hasta ahora hemos cubierto todas sus necesidades», afirmó.
Ante la previsión de más lluvias, Enríquez Ortiz informó que el auditorio municipal podría habilitarse como albergue en caso necesario. «Hemos hablado con maestros para utilizar sus auditorios y contar con más espacios si es requerido», agregó.
El deslizamiento en el cerro de Omiquila ocurrió el domingo pasado, y aunque las seis familias evacuadas han regresado a sus hogares, la preocupación persiste por las condiciones climáticas venideras.
Gabriela Domínguez
