Poza Rica, Ver.- En conferencia de prensa, la gobernadora Rocío Nahle habló sobre el caso de Poza Rica, donde se han registrado al menos siete secuestros de funcionarios públicos, quienes fueron localizados con vida, pero que en la mayoría de los casos optaron por renunciar a sus cargos.
Nahle García explicó que cada región del estado presenta contextos distintos en materia de seguridad. En el caso específico de Poza Rica, dijo que se hizo una invitación respetuosa para revisar el actuar de los elementos de la policía municipal, particularmente después de los atentados a los dueños de las pastelerías Dauzón.
“Hubo una coordinación entre la Secretaría de Seguridad Pública y el propio ayuntamiento para señalar que ciertas personas no debían estar en cargos estratégicos. El alcalde ha tomado acciones al respecto”, dijo.
Agregó que si bien no se ha comprobado la responsabilidad directa de los funcionarios involucrados, sí existía al menos un elemento que habría filtrado información, lo cual generó preocupación.
La gobernadora reconoció la disposición del alcalde Fernando Luis «Pulpo» Remes Garza para colaborar en la depuración de mandos y funcionarios con posibles vínculos o comportamientos que pongan en riesgo la seguridad.
De la Redacción
