Orizaba.- Conforme al Derecho Canónico, los sacerdotes y obispos deben presentar la renuncia a su oficio al cumplir 75 años de edad, por lo que el Padre Antolín Bernardi Castelán, a sus 83 años de edad ofició su última Eucaristía, tras 59 años de servicio religioso.
Su retiro anunciado la semana pasada causó inconformidad entre un gran número de feligreses que destacaban que el presbítero se encuentra en cabalidad de sus facultades, por lo que aún podía seguir en el oficio, y que el retiro le afectaría en su vida.
“El Padre Antolín cumplió 75 años hace 8 años, sin embargo, el Señor Obispo le concedió continuar un tiempo más como párroco en Catedral y, posteriormente, en una responsabilidad menor en la Rectoría del Carmen. Ahora es justo que deje de llevar la responsabilidad de una comunidad y ejerza su ministerio presbiterio en una situación más adaptado a sus fuerzas”, refiere la Diócesis de Orizaba a través de su medio oficial de comunicación Buena Noticia.
El Padre Antolín nació en Zentla y se ordenó como sacerdote en la ciudad de Roma en 1962. Y pese a la pandemia de Covid-19, nunca dejó de ejercer en la Rectoría de Nuestra Señora del Carmen en Orizaba. Ahora será enviado a una casa de retiro.
De la Redacción