Un tribunal federal confirmó que Mauricio Audirac Murillo, ex secretario de Finanzas y Planeación de Veracruz durante el sexenio de Javier Duarte, es responsable de daño al erario por 944.4 millones de pesos, difundió anoche el diario Reforma.
El Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) declaró infundado el juicio de nulidad promovido por Audirac Murillo, para impugnar la responsabilidad resarcitoria que la Auditoria Superior de la Federación (ASF) le fincó en julio de 2019.
Dicha sanción fue fincada porque, en 2014, Audirac firmó dictámenes de suficiencia presupuestal para utilizar recursos federales del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento para las Entidades Federativas, para pagar sueldos y salarios de maestros, desviando el dinero de sus fines legales.
La Sala Superior del TFJA rechazó por unanimidad los argumentos de defensa de Audirac, varios de ellos relacionados con supuestas fallas formales de la ASF durante el procedimiento administrativo
«Se hicieron erogaciones de gasto corriente no financiables con el citado Fondo (de Aportaciones)», explicó el magistrado Juan Manuel Jiménez.
El magistrado Víctor Orduña consideró que la sanción de la ASF es legal, porque Audirac firmó los dictámenes, pero no es justa.
«No se advierte que hubiera desviado el dinero a favor propio, que lo hubiera desviado a un tercero, no se advierte que hubiera tenido un beneficio personal», dijo Orduña, quien consideró que Audirac seguramente actuó por órdenes superiores.
Audirac sólo fue secretario de Fianzas de Duarte de julio de 2014 a marzo de 2015.
La sentencia del TFJA no es definitiva. Audirac, quien también ha enfrentado varias acusaciones penales, puede impugnarla mediante amparo directo ante un tribunal colegiado de circuito.
La ASF ha fincado desde hace años múltiples sanciones de responsabilidad resarcitoria contra miembros del gabinete y otros funcionarios del Gobierno de Veracruz en el periodo de Duarte, de 2010 a 2016.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) es el que debe ejecutar estas sanciones, algunas hasta por más de mil millones de pesos, lo que es prácticamente imposible, pues los señalados no tienen el dinero para resarcir los daños que se les imputan.
