Orizaba, Ver.- El obispo de la Diócesis de Orizaba, monseñor Eduardo Cervantes Merino, expresó que la violencia es algo a lo que no debe acostumbrarse nadie.
Comentó que lastima y duele, pero además preocupa lo sucedido en la zona conocida como Cerritos, en donde fue encontrado el cuerpo de un joven abogado asesinado y desmembrado.
Aunque admitió que no es algo que ocurra con frecuencia en la ciudad, reconoció que en la región y en el estado se llegan a ver esas situaciones de manera constante.
«No es tan común y tampoco se nos tiene que hacer común, porque tal pareciera que en la región, en el estado de Veracruz, entre otros, esto ya es común», dijo.
Sobre el hallazgo del joven, comentó: «me preocupa, me causa dolor y tristeza cualquier situación de agresión contra la persona«.
Indicó que las autoridades tendrán que realizar la investigación correspondiente para aplicar la ley y que se acabe con la cultura de la impunidad.
Gabriela Domínguez
