Orizaba, Ver.- Un acto de solidaridad y cuidado ambiental se vivió en la Laguna del Chirimoyo, donde alrededor de 70 peces fueron rescatados por un grupo de ciudadanos preocupados por su bienestar.
Ante la irremediable sequía del cuerpo de agua, unas 15 personas se unieron para salvar a estos animales de una muerte segura.
Utilizando redes y cañas, los voluntarios lograron rescatar tilapias, bagres y carpas Koi; sin embargo, se descubrió que muchos de ellos padecían enfermedades y parásitos, por lo que se decidió trasladarlos temporalmente a estanques habilitados por un activista local.
Óscar Huerta, uno de los principales promotores de esta noble acción, destacó la importancia de brindar una segunda oportunidad a estos peces. Aunque lograron rescatar una cantidad considerable, Huerta mencionó que aún quedan más peces en la laguna, por lo que planean regresar para seguir salvando vidas.
Los peces rescatados serán tratados en los estanques temporales hasta su total recuperación. Se estudiará la posibilidad de trasladar algunas especies, como las carpas Koi, a lugares donde puedan prosperar y tener una mejor calidad de vida.
En estos días en los que el «vaso regulador» está prácticamente seco, ha sido posible observar a decenas de personas que se lamentan por las condiciones del lugar y que admiran la belleza de las aves que aún permanecen; incluso, religiosos han orado elevando sus manos, mientras elementos de la policía municipal realizan rondines, lo que nunca antes habían visto las personas que diariamente se ejercitan ahí.
Gabriela Domínguez
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