Acultzingo, Ver.- José Mauro, el gigante de Acultzingo tiene 30 años, mide 2.25 metros y desde hace un tiempo cobró notoriedad porque empezó a viajar a Orizaba para pedir unas monedas en el centro.
Su enorme estatura llamó la atención de diferentes medios de comunicación que comenzaron a difundir su historia.
Por la condición precaria en la que vive su familia, Mauro solo estudió la primaria y comenzó a trabajar como albañil, era un chico fuerte, cuenta orgulloso que cargaba hasta 100 kilos.
Poco tiempo después enfermó de la tiroides y comenzó a crecer incontrolablemente, le diagnosticaron gigantismo.
Perdió fuerza en sus manos, brazos y rodillas, dejó de caminar.
Fue este año cuando sus piernas comenzaron a deformarse, le resulta imposible sostenerse en pie. Necesita ayuda.
José Mauro Romero Hernández necesita ropa y calzado de gran tamaño, lo que tiene, ya no le queda, tampoco puede trabajar, su cuerpo es débil, pide ayuda a la gente generosa.
«Le pido a Dios que los ayude para que también me ayuden a mí».
Con información de AVC