Ixtaczoquitlán, Ver.- La planta baja del Palacio Municipal fue el escenario de una sesión de cabildo extraordinaria convocada por la síndica y seis de nueve regidores. El alcalde Nahum Álvarez Pellico, quien se negó a participar, también rechazó prestar la sala de Cabildos para la reunión.
La síndica y seis regidores tomaron decisiones trascendentales. En primer lugar, se votó a favor de la creación del Instituto Municipal de la Mujer, una iniciativa que llevaba dos años sin ser aprobada, debido a la objeción del alcalde sobre la propuesta de la persona para dirigirlo.
La regidora Gilda Salinas destacó la urgencia de establecer el Instituto Municipal de la Mujer, subrayando que la propuesta inicial del alcalde no cumplía con el perfil necesario y que él impedía considerar a otras personas para el cargo.
Además, se tomó la decisión de destituir al titular de Obras Públicas, en medio de alegaciones de irregularidades financieras.
Al respecto, el regidor Oscar Dorantes Maciel señaló que el funcionario, tiene una formación académica en gastronomía, lo que lo hace poco idóneo para ostentar el cargo.
El regidor Roberto González Cruz señaló que la auditoría del Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis) para el ejercicio 2022 reveló presuntos desvíos de más de 5 millones de pesos. Además, mencionó que, durante este año, han descubierto obras con costos inflados hasta en un 50 por ciento.
Ciudadanos presentes en la sesión solicitaron la palabra para exponer diversas problemáticas y necesidades en sus colonias y localidades.
La legalidad de la sesión fue respaldada con base en el artículo 29 de la Ley Orgánica del Municipio Libre, que permite a los ediles celebrar sesiones extraordinarias en casos de asuntos urgentes o por solicitud de alguno de ellos. Sin embargo, se destaca que, para la validez de estas sesiones, se requiere la presencia de la mitad más uno de los ediles, incluido el alcalde.
Lo que quedó evidente en esta reunión es la pérdida de mayoría del presidente municipal en el Cabildo, señalando una creciente tensión política en Ixtaczoquitlán.
Gabriela Domínguez
