Orizaba, Ver.- Debido a la escasez de fertilizantes y a la consecuente alza en los precios por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, en todo el mundo hay una crisis en la producción de alimentos, indicó el investigador de la Universidad de Chapingo Gerardo Noriega Altamirano.
El investigador y especialista en suelos señaló que aunque en el país se produce petróleo y gas, materia prima para los fertilizantes nitrogenados, no se tiene la tecnología para producirlos, por lo que se importan principalmente de Rusia, Ucrania y China.
Ante esto, los abonos comenzaron a escasear y aumentaron su precio, lo que hoy tiene en jaque a todo el mundo.
Respecto a la demanda de alimentos orgánicos, indicó que la gente cuida cada vez más su alimentación, sobre todo después de la pandemia, por lo que se debe hacer a un lado el uso de sustancias tóxicas y en vez de ello generar un campo orgánico.
Consideró que los hombres del campo deben reinventarse para atender la demanda que hay por vegetales y animales, sin afectar a la naturaleza, pues de lo contrario simplemente no van a vender.
El investigador acudió al Comité Regional Campesino de Orizaba, en donde ofreció una plática a productores de la zona.
Gabriela Domínguez