Ubicado en Orizaba, Veracruz, el Jardín Botánico BiOri se ha posicionado como un lugar destacado en la región, atrayendo tanto a locales como a turistas. Este jardín es un espacio único que fusiona la belleza natural, la cultura y la arquitectura, ofreciendo a los visitantes una experiencia enriquecedora en cada rincón.
Con una estructura que abarca distintas zonas temáticas, el BiOri permite un recorrido por diversas partes del mundo. En la sección dedicada a Europa, destaca un molino holandés, «El Molino del Arte», desde donde se puede disfrutar de una impresionante vista del jardín.
La zona mexicana, por su parte, es ideal para los turistas que buscan una buena foto, mientras que el área asiática cuenta con un jardín japonés y un pequeño lago, hogar de 65 bonsáis, algunos de los cuales tienen más de 80 años de vida. La sección africana, recientemente renovada, presenta un temazcal rodeado de un riachuelo que desemboca en un estanque con tortugas.
Uno de los principales atractivos del BiOri es su orquideario, uno de los más grandes en Veracruz, donde los visitantes pueden observar diversas especies de orquídeas en plena floración.
Además, el aviario, que comenzó con 25 aves y ahora alberga más de 100, es un lugar ideal para quienes desean interactuar con especies como los agapornis y periquitos australianos, convirtiéndolo en un sitio popular entre las familias.
El jardín continúa renovándose, incorporando nuevos proyectos como un riachuelo que cruza la zona del temazcal, brindando una conexión especial con la naturaleza.
Además, el BiOri ha organizado eventos que promueven las tradiciones locales, como las limpias y purificaciones, que han sido bien recibidos por los visitantes. En cuanto al temazcal, se ofrece como parte del costo de entrada, permitiendo a los turistas vivir una experiencia auténtica de esta tradición mexicana.
Gabriela Domínguez