Orizaba, Ver.- El alcalde Juan Manuel Díez Francos descartó que los recientes homicidios de una menor y un matrimonio ameriten un aumento en las seguridad de la ciudad. A su parecer, estos actos violentos fueron perpetrados por personas fuera de sus cabales, posiblemente bajo el efecto de las drogas.
«Un parricida, ¿Qué podemos hacer?» comentó el alcalde, en referencia a uno de los crímenes, sugiriendo que el consumo de estupefacientes habría influido en el comportamiento de los agresores. Aunque reconoció que han sido días difíciles para la ciudad, insistió en que la seguridad en general sigue siendo adecuada y que estos incidentes son aislados.
Díez Francos también subrayó que la responsabilidad de evitar tragedias de este tipo recae en la sociedad, enfatizando la importancia de fomentar entornos familiares saludables.
Consideró que más allá de las medidas de seguridad pública, es vital que los hogares orizabeños proporcionen un ambiente saludable que no permita este tipo de tragedias.
Gabriela Domínguez
