Orizaba, Ver.- El deslave en la autopista Orizaba-Puebla, a la altura de El Mirador en Maltrata, ha suscitado preocupación por sus causas y sus efectos en la región. El ambientalista Ricardo Rodríguez Deméneghi señaló que la deforestación es uno de los principales factores de este tipo de incidentes.
Explicó que la pérdida de árboles desde zonas altas hasta áreas costeras afecta la estabilidad del suelo y limita la capacidad de absorción del agua de lluvia. A esta situación se suman incendios forestales recientes y una sequía prolongada de cinco años, lo que ha dejado laderas vulnerables al deslave. Sin vegetación para retener el suelo, el agua se acumula en las pendientes, aumentando el riesgo de derrumbes o lahares.
Para el ambientalista, esta situación es una alerta para tomar acciones urgentes, tanto para la conservación de los bosques como para la implementación de medidas de retención en zonas afectadas.
Enfatizó que la protección de los bosques no sólo previene deslaves, sino que también es clave para el suministro de agua, lo que demanda una mayor responsabilidad ambiental en la región.
Gabriela Domínguez