*De Rafa Nadal: Nadie se acuerda de las victorias, solo de las derrotas. Camelot.
Gilberto Haaz Diez
EL NUEVO CHAVAL DEL TENIS (CARLOS ALCARAZ)
Se podría escribir que es el nuevo rey del tenis mundial, pero apenas son sus comienzos. Todo este fin de semana, para aquellos que gustan del tenis, Carlitos Alcaraz, como le llaman, mantuvo a la afición en total contacto, jugó tres duelos de muerte para alzarse con el campeonato del Master 1000 de Miami, el primer español que lo hace y el más joven de todos los que por allí han llegado, 18 años y unos cuantos 11 meses. Es la sensación del mundo y está haciendo que la afición regrese a las canchas, que se comenzaban a alejar. Lo digo Yo Mero que alguna vez viví las épocas del pasado y vi en vivo jugar a los grandes: John McEnroe, Jimmy Connors, Bjon Borg, Vitas Virulaitas, Iván Lendl y aquellas mujeres, entre ellas, Chris Evert y Martina Navratilova y esa pléyade de estrellas. A ellos los admiré en un abierto de Nueva York, en aquel viejo Flushing Meadow, un abierto que ganó un mexicano, El Pelón Osuna (septiembre de 1963), cuya galería con los triunfadores allí aparece su nombre, que llena de orgullo a los mexicanos, y también en el Deportivo Chapultepec a uno de los mejores doblistas mexicanos, Raúl Ramírez, quien obsequió a mi hijo Juan Carlos, que era pequeño, allí en el hotel Camino Real que era sede del evento de la Copa Davis, una raqueta de madera que él guarda y atesora porque la firmó Raúl cuando con el lápiz labial de quien era su novia y luego sería su esposa, la modelo y Miss Universo, Maritza Zayalero, la venezolana, pero esa es otra historia. En Miami Alcaraz regresó a los aficionados a admirar ese deporte. Lleno total, el chaval de 18 años cautivó, a punto estuvo en el torneo pasado de ganar a Rafa Nadal, de quien todos en España y el mundo dicen será su sucesor. Fue una tarde apacible, de emociones, salí con hambre después del juego y me fui a comer al restaurante Montellano, el de Federico, de la orizabeña calle Colón, donde se come como campeón.
TO BE OR NOT TO BE (SER O NO SER)
Esta frase o verbo de Shakespeare, nos lleva siempre al Hamlet donde lanza su monólogo de ser o no ser, y luego se esconde como el fiscal Gertz Manero. Viene el 10 de abril y la votación para revocar el mandato divide a los mexicanos. Los funcionarios públicos, todos, violando las leyes, donde el INE les prohíbe todo, pero a ellos les vale. Hay gente que saldrá a votar. Hay otra que no lo hará. Yo Mero me incluyo entre los que no votaré porque el presidente AMLO no necesita revocación, nadie le está pidiendo que se vaya, nadie, y eso es una gastadera de dinero, dicen los críticos y enterados, pero llega el 10 de abril y en Veracruz el acarreo en Xalapa estuvo canijo, manito, diría Minga, una gente de mi pueblo. Yo no sé muchas cosas es verdad, por parafrasear a León Felipe en ‘me sé todos los cuentos’, pero pienso que este país seguirá dividido hasta el día que AMLO se vaya y, llegue quien llegue, quizá viviremos otro México no de tantas confrontaciones. Ojalá.
EL GOBERNADOR MAURICIO KURI
Sin conocerle personalmente, sin haberle tratado, solo de oídas y algunos mensajes que por el WhatsApp nos enviamos, desde que punteaba en el PAN como vicecoordinador, muchos de los que aquí vivimos en Orizaba, le veíamos como un gran prospecto para ser gobernador del estado de Querétaro. Hijo de orizabeños muy queridos, con amigos en esta zona que los aprecian, la familia Kuri González gozaba y goza de la atención de los orizabeños porque, entre otras cosas, se le veía un futuro político. Así fue. Llegó la elección y fue el gobernador más votado del país, en un estado tranquilo. Pero un mal día se le aparecieron los fantasmas en el futbol y en un juego contra El Atlas, ese mundo tranquilo se movió. Actuó como gobernador en la emergencia, al momento activó los protocolos para ir en apoyo de los aficionados, desde su Situation Room fijó las prioridades, atender a los lesionados, visitó los hospitales donde había gente lastimada y siempre estuvo al lado de la afición, de los de casa y de los de fuera. Fue bueno su trabajo. Ayer le vi en la tele en Milenio y, con cara seria, con el semblante de quien gobierna bien, tomó una decisión que debe ser dolorosa para su equipo, destituyó al secretario de Seguridad Ciudadana y al de Protección Civil, y le dio vuelta a esa hoja que manchó por un ratito a ese estado y a su gobierno. Pero ahí va, caminando y proyectando cosas buenas para ese estado, este hijo de orizabeños que es un orgullo de esta tierra que tiene un Pico de Orizaba y es Pueblo Mágico. Ah, y ya algunos, entre ellos, Marko Cortés, presidente nacional del PAN, ya le ven figura de presidenciable.